La Reanimación Cardiopulmonar (RCP) constituye una serie de técnicas que nos ayudan a salvar una vida. El propósito es realizar compresiones en el pecho cuando el corazón ha dejado de latir (que pueden ir acompañadas de ventilaciones con el equipo de protección adecuado) para favorecer la circulación sanguínea y mantener un adecuado flujo a los órganos vitales, en caso de un paro cardiaco.

El Dr. Manuel Celaya es parte desde hace 10 años de una asociación civil llamada “Tu corazón nos une” que tiene como objetivo llevar entrenamiento en RCP y uso de DEA a todas las comunidad del estado de Sonora.

El RCP inicia desde épocas muy antiguas pero, alrededor de los años 50’s es cuando se visualiza que las compresiones pueden ayudar a restablecer temporalmente el flujo sanguíneo; sin embargo, no es hasta los años 60’s cuando se crean los lineamientos como actualmente las conocemos y a lo largo de los años se ha perfeccionado la técnica y esta sigue en constante mejora.

Pero, ¿qué debemos hacer en una situación de emergencia?

1. Lo primero es asegurarse que el lugar es seguro para ti.

2. Acercarse a la persona tomarla de los hombros y decirle… “ Sr./Sra./niño ¿está usted bien?” tan fuerte y claro que pueda escucharlo.

3. Si no responde es momento de pedir ayuda, hay que llamar al 911, y conseguir un desfibrilador automático externo o (DEA) si se tiene acceso a este.

Lo siguiente es iniciar con la RCP, para ello debemos:

4. Descubrir el tórax del paciente.

5. Y comenzar con las compresiones torácicas, entrelaza ambas manos y llévalas al centro del pecho, (entre las tetillas sobre el esternón) manteniendo un ángulo recto entre tus brazos y el cuerpo de la víctima.

6. Debemos comprimir fuerte, rápido y continuo a una velocidad de 100-120 compresiones por minuto, esto de forma continua hasta que llegue la ayuda.

Posterior a que llegue el desfibrilador, hay que colocarlo y seguir las indicaciones de este. Es un dispositivo seguro que podría incrementar hasta en 80% la sobrevida de las personas en paro cardíaco.

Recuerda, lo más importante es identificar que la persona está en paro, pedir ayuda al 911 e iniciar compresiones lo más rápido posible.

¡Todos podemos salvar una vida!